Amor y Suéteres

Estos últimos días viernes han venido acompañados de lecciones, tras lecciones,tras lecciones, algunas promesas y uno que otro conse (aplicarlos o no ya es otra cosa). El día de hoy vino mas bien acompañado con una historia. Puff, no recuerdo el nombre del autor o de la historia, solo sé que era un psicologo y trataba de explicar mediante este cuento una de sus teorías, referentes a lo decisivo que es para un niño pequeño recibir amor y cariño.

De acuerdo a esta historia, el amor es una especie de suéter, que va tejiendo la madre (o algún sustituto de esta) alrededor del niño, y con esto se va desarrollando la confianza y la percepción de sí mismo en el niño... Así de fácil suena aparentemente, pero no todo estan sencillo, ya que si la madre (o sustituto de esta) teje de mas, osea brinda mas de lo necesario, el suéter será tan largo que no dejará caminar al niño por sí mismo (¿sobreprotección?), y si el suéter es muy corto, pues será difícil para él, mas adelante, brindar amor, o lo que e slo mismo, tejer este suéter en alguien mas, porque eso sí, las madres no sacan el hilo para tejer de cualquierlado, lo sacan de su mismo suéter, y así escon todas las personas, de su propio suéter obtienen lo necesario para crear otro en los demás, definiéndose esto, como antes que nada... Básicos I para amar: Ámate a ti mismo, imposible querer a otros si tú mismo no tienes bien armadito tu "jersey del amor".

Pero ahora viene la parte que se me hizo mas interesante, en este amar y ser amado, si bien al igual que un tejido puede crearse, también puede deshacerse, sin embargo el hilo entre esos dos seres no puede cortarse. Si bien, en el relato se propone como única solución para "desenamorar" el hablar, la comunicación, y así se irán desatando los nudos,mientras seamos sinceros y aclaremos las cosas. Mas siempre quedará un hilo que una a las dos personas, siemrpe queda un lazo entre los dos, quizá hasta un pequeño parche de amor incondicional que va haciendo mucho mas variada y lujosa tu vestimenta, a fin de cuentas el amar realmente a alguien y aprender de ello, deja siempre un rastro.

Aunque claro, viéndolo por el lado negativo, hay algunos que únicamente son coleccionistas de suéteres, y van por la vida haciéndose con las prendas de una persona, hasta que se acaba y buscan a la siguiente, claro estas personas son completamente inseguras, necesitan una enorme cantidad de protección, pero es esto a costa del amor de otros. No se dan cuenta de lo que en verdad hace variado y fuerte a un suéter, la reciprocidad, ceder para recibir y así enriquecerte realmente, no para terminar ahogandote entre tela sin sentido y fin.

¿Cuántas personas he dejado con retazos de mi suéter, y al mismo tiempo yo quedándome con pedazos del suyo? ¿En quiénes construí un parche que protegiera algún hueco?¿Con quiénes tengo ese hilo indivisible?

Algo complicado... entre tanto hilo creo que es muy fácil hacerse bolas...


Por lo demás, me quedo sin hilo... y sigo sin sueño...