12/11/09

Minotauro

En plena calle de Creta, como en muchos otros barrios, de un día para otro surgió una de esas cadenas transnacionales de venta de alimentos y demás víveres para el sustento del pueblo, la conocidísima y prestigiada tienda "Labyrinth", o "El Laberinto" como se conocería después en la colonia. Con sus cientos de pasillos y anaqueles, productos de colores y muchas promesas de precios bajos, representaba un amenaza terrible para los pequeños negocios de la calle, entre ellos la pequeña tienda familiar "Atenas", propiedad del señor Egeo y su hijo Teseo.

Al principio no se sintió el impacto, pero habiendo pasado un par de meses las ventas bajaron de una forma radical, afectando no solo a "Atenas" sino a todos los establecimientos circundantes, y es que ¿quién podía competir con esos precios y vivir para contarlo?

El dueño de esta sucursal de "El Laberinto", Minos, con la ayuda de su hijo, a quien todos apodaban el "Toro" (apodo recibido debido a que no era realmente hijo de Minos, sino de un güey con quien se acostó su esposa Paz), pasaban de tienda en tienda tratando de convencer a los jóvenes ayudantes de los negocios para que dejaran sus, ahora poco fructíferos, comercios y se iniciaran en la modernidad, uniéndose como empleados multifuncionales en esta gran empresa. Aunque al parecer lo que realmente convencía a los inocentes comerciantes, era la terrible apariencia de chacalón del "Toro".

Muchos sucumbieron antes estas promesas e implícitas amenazas, quedando como única competencia a esta gran transnacional, la tienda del señor Egeo quien hizo hasta lo imposible por mantenerla en pie con la ayuda de su hijo. Sin que su padre lo supiera, Teseo, ya bastante desesperado por la situación en la que vivían decidió concretar una cita con Minos y tratar de llegar a un acuerdo de ventas, o algo que no dejara en tal mal situación a su tienda y le permitiera sobrevivir. Asi que un día fué a visitarlo.

Llegando a la oficina de Minos, no pudo creer lo que sus ojos vieron al entrar, una muy bella chica de cabello recogido y tímida mirada , y como no, si se trataba de Ariadna, la hija de Minos, que trabajaba como secretaria personal de su papá. Al ver Ariadna a Teseo, que tampoco estaba nada mal, quedó completamente prendida a él. Sostuvieron una breve charla mientras Teseo esperaba a la llamada de Minos. Hablaron sobre la situación en que vivían el jóven galán y su padre, la forma en como habían tenido que promocionar y echarle ganas en la tienda para que esta no quebrara. Esto, incrementó aún mas la admiració que Ariadna comenzaba a sentir por Teseo.

De repente se escuchó la voz de Minos invitando al muchacho a pasar, por lo que tuvieron que interrumpir su plática, aunque no dejaron de lanzarse miradas coquetas y lujuriosas mientras Teseo caminaba hacia la puerta del déspota empresario.

Total, Minos y Teseo no llegaron a ningún acuerdo,y este salió completamente decepcionado de la oficina. Al verlo, Ariadna no pudo sentir mas que compasión por el, y sabiendo la injusticia que se cometía por parte de la empresa, y pero aún por parte de su padre, decidió ayudarlo. Sabiéndo que lo que en verdad temían los comerciantes eran los músculos y carácter del "Toro", había que, antes que nada, deshacerse de él.

Ariadna ideó un increíble plan. Sabiendo que su hermano no tenía nada de sesos, pero si bastante honor, Teseo tendría que retarlo en una lucha a una caída sin límite de tiempo, y el "Toro" claro que aceptaría, si era fanatico de la AAA y toda la onda luchística, pero obviamente esto no lo haría más fácil, al contrario. También, como el "Toro" dormía dentro del almacén, muy al fondo de la bodega, Ariadna ató a Teseo de uno de los extremos de un ovillo de hilo cáñamo que vendían en "El Laberinto", y que ayudaría a Teseo a regresar rápidamente y sin problemas mientras se abría paso a través del oscuro y enorme establecimiento.

Así que, siendo ya medianoche, con Ariadna echando aguas en la puerta y sosteniendo un extremo de la soga que ayudaría a Teseo , se aventuró este sin nada mas que sus manos para enfrentarse a tamaño "buey".

Pasó las cajas, una vuelta a la izquierda entre la ropa de caballeros, pasando por lencería y farmacia. Llegó hasta los anaqueles de juguetería y dio vuelta a la derecha para avanzar hasta lácteos y siguó su camino rumbo a la panadería por donde le contó Ariadna que estaba la entrada a la bodega.

Cuando entró, el "Toro" estaba despierto veindo un programa de chistes baratos en la t.v.. Teseo levantó la voz proponiéndole el reto, exigiendo que si ganaba dejaría de molestarlos a él y a todos los pequeños comerciantes de los alrededores. El "Toro" solo volteó a verlo, y con sus inhumanos mujidos pereció responder un "acepto". Inmediatamente se abalanzó sobre Teseo. Este, no tan grande pero si mucho mas ágil pudo esquivar el enorme cuerpo que se abalanzaba sobre él, haciéndose a un lado para continuar el ataque. Y así, entre "manitas de puerco", "hurracarranas", un par de "llaves nelson", un "tope suicida" fallido por parte del "Toro" y finalmente una "quebradora" que surgió gracias a una fuerza inhumana escondida dentro de Teseo, el jóven acabó con el gran monstruo.

El "Toro", aunque humillado al ser vencido en su disciplina favorita, aceptó el trato, accediendo a no ser mas parte del negocio de su padre. Teseo, gracias a la cuerda que se ató regresó fácilmente a la entrada donde Ariadna lo esperaba, y le agradeció a esta por su ayuda con un gran beso que terminó en una noche en el motel de la colonia.

Los comerciantes aunque la tuvieron difícil para poner en pie nuevamente sus negocios, hicieron circo, maroma y teatro para lograrlo, muchos fracasaron pero los que lograron salir adelante, pusieron en jaque al "Laberinto" por medio de tratos sucios con los proveedores y una campaña de desprestigio que terminó haciendo que la sucursal quebrara y pudieron seguir con sus vidas de comerciantes.

Con respecto a Ariadna y Teseo, este la dejó abandonada en "Naxos", el motel donde pasaron la noche, despertando sola en el cuarto de mala muerte y algo trsite porque a pesar de su apariencia Teseo no daba "el ancho" y la dejó bastante decepcionada... Pero no se preocupen ahí conoció a Dionisio,que la teminaría haciendo "diosa", pero esa ya es otra historia...


4 comentarios:

  1. Jajajaja
    Mitología urbana, mi estimado. Ahora imagínate el relato de Saturno comiéndose a sus hijos....Muy buena historia, entretenida y con final ¿feliz? Bueno, depende de la óptica.

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  2. Cada día me caes mejor. Lée esto: http://lasvirgenesimaginarias.blogspot.com/2009/07/romeo-y-juliana.html.

    Como decía el personaje de Derbez: coincidencia...o destino?

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  3. Noé jaja

    jaja lo bueno d ela mitología griega es que es bastante humana y aplicable jaja

    final feliz... para ariadna...
    teseo sufrió un poco... con decirte que su papá de murió cayendo a un barranco, disque por la tristeza de que su hijo no llegó a dormir por andar luchando con el"toro", le dió el mal de la tristeza y pákatelas que se nos echa a un barranco, peor bueno Teseo se ocupo d ela tienda y hasta anduvo peleando contra los ideales de las "Amazonas" ese club lésbico tan famoso y rudo en ese entonces... pero hatsa terminó casado... con la hermana de Ariadna oseaaa así o mas fea enredada su situación jaja... o es que solo ocurre así en mi mente

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  4. Gus:

    jaja hombree wooooow la amé la historia jaja
    mejor que la versió con leonardo di caprio jajaja

    caray destino quizas jaja que miedo

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